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San Luis se lavó la cara

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El largo camino para ver un San Luis en Primera empezó hace tiempo, cuando todos pensábamos que la Copa Chile iba a servir para ganar partidos y minutos de cara al torneo local. El grupo era muy difícil (tres equipos de Primera) y el Canario venía de salir ÚLTIMO en el Torneo de Transición. Sin embargo, una fría noche en el Lucio Fariña, el local le demostró a Santiago Wanderers para qué iba a estar en el certamen, con un primer tiempo que nos ilusionó. En el complemento, acecharon los viejos fantasmas y el partido terminó empatado. Sin embargo, nos fuimos esperanzados. Luego, los caturros nos bajaron a tierra, claro 3 a 1 y un millón de dudas, con Miguel Ponce pidiendo a gritos más refuerzos. Pero de a poco las piezas empezaron a funcionar, lógicamente la llegada de César Villegas al mando del fútbol profesional fue una inyección económica (y anímica) clave para el club y el plantel. Se vinieron los clásicos. Un 1 a 1 que nos dejó en claro que el equipo tenía espíritu

El Último Clásico y la botella de champagne

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Si en estos días preguntaste las razones de tantos festejos, felicidad, fotos, champagne, etc., te invito a leer un par de líneas. La historia es larga, pero voy a tratar de resumirla. Decir qu e es el “clásico” o el “eterno rival”, no se acerca en nada a las razones. Porque esto va mucho más allá, esto es tener que aguantarte que su Presidente reconozca que hayan comprado un campeonato y nadie diga nada, es ver cómo le tiraron una bengala a un arquero rival e igual salieron campeones reconociendo que fue gracias a Papi Grondona. Es bancarse que el mismo dueño del fútbol haya dicho que mientras él viva, nunca iban a quebrar. Y como frutilla del postre, Marconi, a viva voz, ese que elige los árbitros, reconoció ante todos su amor por tu club. O, simplemente, relatar un par de cosas que pasaron una tarde de febrero, cuando fuimos a esa cancha que es imposible que esté habilitada, pero lo está. Esa cancha donde en ese clásico colgaste una bandera que decía “Los grandes nunca descienden” y