San Luis se lavó la cara


El largo camino para ver un San Luis en Primera empezó hace tiempo, cuando todos pensábamos que la Copa Chile iba a servir para ganar partidos y minutos de cara al torneo local. El grupo era muy difícil (tres equipos de Primera) y el Canario venía de salir ÚLTIMO en el Torneo de Transición.

Sin embargo, una fría noche en el Lucio Fariña, el local le demostró a Santiago Wanderers para qué iba a estar en el certamen, con un primer tiempo que nos ilusionó. En el complemento, acecharon los viejos fantasmas y el partido terminó empatado. Sin embargo, nos fuimos esperanzados.

Luego, los caturros nos bajaron a tierra, claro 3 a 1 y un millón de dudas, con Miguel Ponce pidiendo a gritos más refuerzos. Pero de a poco las piezas empezaron a funcionar, lógicamente la llegada de César Villegas al mando del fútbol profesional fue una inyección económica (y anímica) clave para el club y el plantel.

Se vinieron los clásicos. Un 1 a 1 que nos dejó en claro que el equipo tenía espíritu, algo ausente en el Torneo de Transición. Y después, la magia. Un clarísimo 1 a 0 con superioridad ante Calera, estirando a 11 la paternidad Canaria. Pero más allá de eso, demostrándonos (y demostrándose) que San Luis puede.

Los dos partidos ante Everton lo confirmaron, los viñamarinos eran líderes y con puntaje perfecto, una parada difícil. Pero el equipo de Ponce lo sacó adelante, ganó los dos y clasificó a Octavos de final de la Copa Chile (se viene Colo Colo), estirando a tres la racha ganadora.

La pregunta era si el objetivo cumplido y lo alcanzado nublaría el objetivo del ascenso y el centrarse en lo primordial, ver a San Luis en Primera. Afortunadamente duró sólo un tiempo ante San Felipe y el Canario lo dio vuelta, en una nueva muestra de personalidad y carácter.

De ahí, el paraguayo Cris Martínez apareció en el Lucio Fariña para ganarle a Coquimbo y el equipo completo en Santiago para golear a Magallanes. Seis partidos seguidos, que empezaron con un clásico. En el medio, una pelea dirigencial con Villegas, como para que nos olvidemos de la incapacidad del manejo de los de arriba.

San Luis se lavó la cara. Desde el gran rendimiento de su columna vertebral  conformada por De Paul, Aravena, López, Borrego y Campos (tres de ellos refuerzos), más el cambio de dibujo táctico de Miguel Ponce (del europeo 4-2-3-1 al cercano, aguerrido y muy del ascenso 4-4-2) y la llegada de Villegas como mecenas.

Ahora, a no nublarse. Paso a Paso que el camino es largo. El sábado a las 18:30 viene San Marcos, es escolta y hay que estar tranquilos, confiados en que San Luis está bien (puede seguir creciendo), pero que el torneo es difícil. Nosotros haremos nuestra parte llevando más gente que los partidos de primera al LFF, espero que los de arriba también.


Gabriel Arias Massa.
Periodista, conductor de Somos Canarios.

Foto: Sitio WEB de San Luis.

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